martes, 4 de junio de 2013

Conclusiones (semi)finales*

*Por aquello de que, Dios mediante, retomaremos el hilo en Practicum II.

La experiencia, como si de un partido de fútbol se tratase, va arribando al descanso. Queda un segundo tiempo (Practicum II), un nuevo capítulo apasionante en el que esperamos contar mucho más. Pero ahora toca hacer una síntesis de la primera parte y analizar cada jugada, minuto y resultado. Porque no hay mejora sin reflexión y autocrítica.
Comenzaré por esta última para terminar con buen sabor de boca. Debo reconocer que han quedado en el tintero cosas que contar y, en ese sentido, al blog le ha faltado algo de conexión con la realidad cotidiana de mis prácticas; hacer honor al nombre: DIARIO de prácticas. A veces, por estimar como anecdótico algún hecho, sin advertir que para el resto podría haber resultado interesante o enriquecedor (dado los ámbitos variopintos de nuestras prácticas) o por evitar redundar, subiendo reflexiones en la línea de las ya publicadas (especialmente en el análisis del entorno). En otras ocasiones, quizás encorsetado por el afán de ceñirme al guion de la PEC, pudo faltar ese carácter de herramienta dinámica que se procuraba. Pero no pretendo flagelarme más (apenas lo justo para tenerlo en cuenta la próxima). Creo que alguna flor merezco.
En mi modesta opinión, las indicaciones referentes al contenido de las entradas se han cumplido en un alto porcentaje (descripción de los objetivos, del contexto, reflexiones personales, etc.). Asimismo, las cuestiones propuestas para el análisis del trabajo, fueron resueltas en su mayoría (ámbito, tipos y contenidos de la intervención, función del psicopedagogo, finalidades y objetivos, mi participación, etc.). También se complementaron las entradas con material audiovisual (presentaciones e imágenes fundamentalmente) acerca de artículos, noticias y temas relacionados y se realizó una descripción del proceso que desencadenó en la elaboración del proyecto. No faltaron los enlaces oportunos y hasta alguna viñeta o música relajante que hicieran más agradable la lectura.
Dejando de lado el instrumento, diremos que las prácticas en sí mismas, me han servido para  constatar la enorme carencia que existe en los centros. Que la falta de presupuesto resulta determinante a la hora de poder realizar un trabajo de calidad y una atención acorde a las necesidades de nuestros alumnos. También aprendí que sin demasiados recursos, pero con vocación y esfuerzo se puede lograr mucho y que la tarea de un buen psicopedagogo (con tiempo) podría suponer la clave del éxito en muchos casos difíciles.
En resumen, PracticumI me ha aportado una visión más real de la difícil (y en ocasiones minusvalorada) labor del psicopedagogo. Sé que habrá ocasiones en las que pueda ver la cara más amable y que la satisfacción por los frutos obtenidos vendrá de la mano y en la sonrisa de un niño. Sea como fuere, he podido aprender que hay mucho que hacer en cada sitio en el que nos encontremos, que son muchos alumnos y familias los que nos necesitan, que existen buenos compañeros que lo dan todo y que los mejores apuntes son, como casi en todas las profesiones, sólo un buen comienzo (pero no te explican que has der ser mago y funambulista).

No hay comentarios:

Publicar un comentario